El nearshoring ha tomado gran relevancia en el panorama económico de México; dicho fenómeno implica la relocalización de operaciones empresariales, la inversión extranjera directa (IED) y transforma el crédito del sector inmobiliario.
Si bien el norte del país, principalmente Nuevo León, ha sido un jugador indispensable en la demanda de espacios, Grupo Luximia asegura que Puerto Cancún también podría ser un actor crucial.
Y es que de acuerdo con la desarrolladora mexicana, Quintana Roo esta es una posición privilegiada para capitalizar el auge de la reubicación de las empresas.
“Su ubicación estratégica en la costa caribeña de México, la infraestructura de primer nivel con la que cuenta y el acceso a mercados clave, la convierten en un imán para las empresas que buscan expandirse en el país”.
Asimismo, la región se está convirtiendo en un polo de desarrollo, con proyectos de bienes raíces comerciales que experimentan un crecimiento y tasas de ocupación altas, que alcanzan casi el 98%, según datos de la Asociación Mexicana de Parques Industriales.
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Factores que explican que Puerto Cancún es clave del nearshoring
Mediante un comunicado, Grupo Luximia presenta cinco factores que explican por qué este paraíso del Caribe mexicano es una pieza clave en el escenario del nearshoring en México:
Ubicación estratégica: Atrae a los mercados de Norteamérica; sumado a que es un punto de entrada y salida ideal para la logística de las empresas que reubican sus operaciones en la región.
Infraestructura de primer nivel: Cuenta con puertos marítimos modernos y carreteras en mantenimiento,
“Puerto Cancún cuenta con diversas opciones necesarias para respaldar el flujo de mercancías y servicios”.
Zona franca: Esto significa que la región ofrece incentivos fiscales y aduaneros para las empresas que operan en el área, lo cual se traduce en menores costos operativos y una mayor competitividad, mismo que atrae a inversionistas de todo el mundo.
Talento mexicano: Cuenta con una sólida base de talento. La proximidad a universidades y centros de formación técnica garantiza un suministro constante de profesionales capacitados en diversas disciplinas.
Incrementa el valor de propiedades sostenibles: El auge de esta relocalización, ha impulsado una creciente demanda de bienes raíces con proyectos innovadores que contribuyen al desarrollo sostenible de la región, que responde a las expectativas de las empresas acerca de la responsabilidad ambiental.